miércoles, 7 de marzo de 2007

Manifiesto de la Asamblea Cultural

Un grupo de ecuatorianos, ciudadanos y ciudadanas, creadores, actores y gestores culturales nos reunimos, por iniciativa personal y en representación de los grupos culturales y artísticos de los cuales algunos formamos parte, con el fin de generar un espacio de reflexión y acción, de análisis, de expresión crítica y propositiva sobre el tema de la cultura y sus amplias y diversas manifestaciones como un derecho de los pueblos y grupos sociales.

En consecuencia, manifestamos nuestro pensamiento activo de que:
1.- La cultura tiene que ver con el mundo de la vida, con la construcción de sentidos que se expresan en la cotidianidad y con las representaciones simbólicas que los humanos construimos en la relación con el medio y con la comunidad de la que formamos parte, en ese sentido la creación artística es un elemento esencial.
2.-Las manifestaciones de nuestra riqueza y variedad cultural, y entre ellas las expresiones artísticas, han carecido de políticas públicas que las sustenten y fortalezcan; mas bien, por el contrario, el sector público, desde las instituciones relacionadas con la cultura, ha mantenido una relación clientelar, nada democrática ni participativa con los actores culturales.
3.- La constitución reconoce que el Ecuador es un país pluricultural y multiétnico (Art.1), que la cultura es patrimonio del pueblo y constituye elemento esencial de su identidad; y afirma que el Estado fomentará la interculturalidad, inspirará sus políticas e integrará sus instituciones, según los principios de equidad e igualdad de las culturas (Art.62). Sin embargo, en los hechos, el Estado ha mantenido una visión unilateral y elitista de lo cultural, con políticas públicas que reprimen, niegan o hacen invisible las diferencias, la diversidad cultural y la alteridad, con prácticas institucionales discriminatorias y excluyentes hacia las culturas juveniles, las mujeres, los pueblos y nacionalidades indígenas.
4.- Requerimos replantear la totalidad de la estructura estatal para reconstruir el tejido social, sobre la base de la conjunción de diferentes y diversos saberes, diferentes y diversas cosmovisiones y diferentes y diversas prácticas sociales que permitan la expresión de nuestras voces otras, esto es la interculturalidad, entendida como una opción política para el cambio.
5.- Convocamos e invitamos a los creadores, gestores, promotores culturales, líderes comunitarios, jóvenes hombres y mujeres, representantes de pueblos y nacionalidades indígenas y afrodescendientes para que mediante procesos participativos vayamos construyendo juntos las políticas (inter)culturales que este cambio de época demanda.
6.- Nos interesa crear un proceso colectivo que contribuya a fortalecer la participación ciudadana y que permita repensarnos como sociedad y reinventarnos como país para la autoafirmación de las identidades, fundamento de un país incluyente.
7.- Nos reunimos para pensar, discutir y formular propuestas de políticas culturales que deberán ser consensuadas con otros sectores, a fin de contar con horizontes que nuestra sociedad múltiple diversa y diferente requiere, que además sean mandatorias para el Estado en su conjunto poniendo énfasis en las instituciones culturales. Frente a la convocatoria a la Asamblea Nacional Constituyente queremos hacer escuchar nuestras voces, para lo cual construiremos participativamente una propuesta de Agenda de la Cultura para dicha Asamblea, este ejercicio de democracia que intentamos ensayar permitirá replantearnos las relaciones de poder dentro de la estructura del Estado: con mirada intercultural y equitativa.

Teniendo este manifiesto como antecedente necesario, queremos convocar a los actores y gestores sociales y culturales con el fin de que participen en el Taller de Trabajo “REPENSANDO LAS POLÍTICAS CULTURALES DESDE LA GENTE” que tendrá lugar el día sábado a partir de las 9 de la mañana en el Paraninfo de la Universidad Andina

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